Podemos llenar muchas cuartillas hablando de Kyoto, Copenhague, Bali, Conferencias Internacionales, Naciones Unidas, ONG's ambientalistas, Green Peace y acuerdos mil, con lugares, fechas, incluso datos anecdóticos, sin embargo la constante es la falta de carácter vinculante de todo esto e incluso el evadir generar un documento realmente coherente, serio, comprometido y cuyo incumplimiento conlleve sanciones serias y significativas.
Pienso que en estos momentos, la humanidad ya no se divide en izquierdas y derechas, tampoco en sapientes e ignorantes, ni siquiera entre blancos y no blancos o ricos y pobres. Me atrevo a proponer una definición que puede parecer difusa, falta de claridad e incluso utópica, pero aquí va: el mundo se divide en personas correctas y personas incorrectas y esto, que puede sonar a indefinición, tiene un fondo que, como verán, por lo contrario, es totalmente claro.
La acumulación de dinero a costa de cualquier cosa, es una de las características comunes a las personas incorrectas, otro lugar común que encontramos en ellos es el desconocimiento de que existen deberes y derechos y que los primeros tienen que ser cumplidos antes que exigir los segundos. Una tercera característica es el desconocer que los derechos de uno terminan donde empiezan los de otro.
Esta corrección o incorrección escapa incluso de lo legal o ilegal, ya que en muchos países, verbigracia el nuestro, las leyes se acomodan para beneficio del mejor postor y por supuesto que engloba una serie de otros aspectos.
Aquí quiero hacer un paréntesis y preguntarles algo, apelando a la honestidad que caracteriza a nuestros lectores, ¿no sabemos acaso quienes son correctos o incorrectos? piensen un momento y repararán en que todos tenemos vecinos correctos y vecinos incorrectos, parientes correctos y parientes incorrectos, compañeros de trabajo correctos e incorrectos, gente que siempre está en alguna cochinada y gente que siempre es decente, a quien podríamos confiar nuestros bienes e incluso nuestras familias.
Lo catastrófico para la humanidad es que justamente esas personas incorrectas son las que, en una inmensa mayoría, detentan el poder económico y por lo tanto el político, dicho de otra manera, son las que conducen el mundo.
Mi aprecio, solidaridad e incluso admiración a todos los correctos que actúan, caso de la gente de Green Peace, defendiendo las ballenas y el mundo todo, aunque fracasen, cual guerreros míticos defendiendo un último bastión; mis respetos a todos aquellos justos, que piensan, hablan y actúan dentro de una estructura única y no moviéndose cual hojas que el viento lleva, de acuerdo a la oportunidad de lograr unas migajas más, ya que aunque sean millones, sólo eso son, migajas de basura que sólo terminan de corromper sus sucias almas.
Recordemos que tenemos hijos, nietos, un futuro y hagamos algo por ellos.
Combatamos en todos los frentes y todos los foros, la batalla final no está perdida. Les adjunto el poema IF de Rudyard Kipling y mi última novela, Tiempo de Ratas (salvando las enormes diferencias, no piensen que no lo sé). Gustavo Bobbio. guborosas@hotmail.
To: ahua@yahoogrupos.
From: jmfernandini@
Date: Thu, 1 Jul 2010 22:07:25 -0500
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From: facultadderecho2008 @hotmail. com
Subject: FW: MAS CLARO NO CANTA UN GALLO, SOBRE LA VENTA DEL GAS...
Date: Thu, 1 Jul 2010 19:06:03 +0200
From: facultadderecho2008
Subject: FW: MAS CLARO NO CANTA UN GALLO, SOBRE LA VENTA DEL GAS...
Date: Thu, 1 Jul 2010 19:06:03 +0200
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La transnacional compra a US$ 0.53 centavos el millar de pies cúbicos del gas de Camisea y lo revende hasta US$ 10.00, pagando apenas US$ 1,135 millones por regalías e Impuesto a la Renta y no los aproximadamente 23 mil millones de dólares que corresponderí Migajas para el Perú, fortuna para Repsol
La transnacional compra a US$ 0.53 centavos el millar de pies cúbicos del gas de Camisea y lo revende hasta US$ 10.00, pagando apenas US$ 1,135 millones por regalías e Impuesto a la Renta y no los aproximadamente 23 mil millones de dólares que corresponderí El especialista en Hidrocarburos Manuel Dammert volvió a denunciar la estafa tributaria y contractual del que el Perú está siendo víctima debido a la exportación del gas de Camisea a precios ínfimos, para luego ser revendidos en el exterior a precios más altos. En la víspera el buque Barcelona Knutsen zarpó de la planta de regasificació Mediante un comunicado Repsol YPF aseguró que el buque Barcelona Knutsen que zarpó de Pampa Melchorita no tendrá como destino Chile. Y aseguró que el gas nacional iría a la planta de regasificació Para Dammert el gas de Camisea tendrá como destino final las plantas de regasificació “El gas de Camisea se irá a cualquier lugar menos a México”, denuncia el especialista. Y añade que “ahora Pluspetrol – Perú LNG sale a decir que el buque que zarpó de la costa peruana puede irse a Canadá, México o Estados Unidos. Ahora ofertan nuestro gas al mejor postor una vez que está en altamar”, advierte. Como señaló a LA PRIMERA, el ex ministro de energía y Minas, Carlos Herrera Descalzi, Perú LNG podría recibir hasta US$ 23,000 millones por vender los 4.2 TCF (trillones de pies cúbicos) del gas nacional a Chile, mientras que el estado peruano apenas recibiría US$ 1,135 millones. De acuerdo al contrato que Perú LNG firmó con el Consorcio Camisea por cada millar de pies cúbicos (MPC o millón de BTU) de gas, el primero le pagará US$ 0.53. El contrato es por 4.2 TCF. De los US$ 0.53 por MPC que facturaran por la exportación del gas, el Estado recibirá US$ 0.27 por MPC (US$ 0.16 por pago de regalías y US$ 0.11 por Impuesto a la Renta). Si Perú LNG paga al Estado US$ 0.27 por cada MPC de gas, entonces por los 4.2 TCF el Perú recaudará US$ 1,135 millones, estima el ex ministro de energía y Minas, Carlos Herrera Descalzi. Y Añade, coincidiendo con Dammert, que el fisco (por Impuesto a la Renta) y las regiones (por canon) perderán miles de millones de dólares al vender el gas a tan ínfimo precio, varias veces por debajo que el precio internacional. Lo que perdemos El ex ministro de energía y Minas advierte que mientras el Perú vende el Gas Natural Licuado a US$ 0.53 por MPC, Bolivia, ahora, vende el gas a Brasil y Argentina cobrando US$ 6.70 y US$ 7.37 por cada MPC de gas, respectivamente. Es bastante perjudicial la exportación del gas con estos precios “depredatorios” que se exporta, mientras Bolivia lo vende hasta 14 veces más caro que el Perú, indica el especialista de Energy Consult, Aurelio Ochoa. Partiendo de ello, según estimó Descalzi, si el Perú vendiera directamente los 4.2 TCF de gas a Brasil a US$ 6.70 por MPC de gas, esto significaría que el Estado recibiría en total US$ 15 mil 758 millones en lugar de los US$ 1,135 millones que recibirá por la “venta” del gas a México. Es decir, el Perú pierde US$ 14,623 millones. Al vender el gas a US$ 6.70 por MPC de gas el Estado recauda US$ 3.78 por cada MPC (US$ 2.54 por concepto de regalías y US$ 1.24 por Impuesto a la Renta). Ahora si los 4.2 TCF fueran vendidos a Argentina a US$ 7.37 por cada MPC con este costo el Perú recibiría US$ 17,334 millones y no los US$ 1,135 millones que Perú LNG le pagará al Estado. Con este precio el Perú deja de recibir US$ 16,199 millones. Al vender el gas a US$ 7.37 por MPC de gas el Estado recauda US$ 4.17 por cada MPC (US$ 2.80 por concepto de regalías y US$ 1.37 por Impuesto a la Renta). Por último, si los 4.2 TCF le vendiéramos a Chile -al precio que el vecino país lo importa de Trinidad y Tobago US$ 10 por cada MPC, el Perú recibiría US$ 23,052 millones y no los US$ 1,135 millones que dejará el lamentable proyecto exportador. Acá el fisco deja de recibir US$ 21,917 millones. Acá se recaudaría US$ 5.66 por cada MPC (US$ 3.80 por concepto de regalías y US$ 1.86 por Impuesto a la Renta). Wilder Mayo Méndez Redacción |
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